A falta de dos días para que el Ministerio de Trabajo publique las nuevas cifras del paro en nuestro país, les desvelamos las claves por las cuales hasta medio millón de desempleados no figuran en las estadísticas. Dos reformas en la normativa realizadas por los Gobiernos socialistas provocan el descuadre en los datos.
En el año 1985, el entonces ministro de Trabajo, Joaquín Almunia, impulsó una orden ministerial por la cual se establecían hasta doce situaciones en las cuales una persona desempleada no entraría en las estadísticas. Era una forma de maquillar los datos en una época en la que los números del paro en nuestro país comenzaban a dispararse.
Este recurso se amplió en el año 2008, poco antes de las últimas elecciones generales, cuando el entonces ministro, Jesús Caldera, añadió un supuesto más a la lista, eliminando de las cifras de desempleados a todos aquellos inscritos en cursos de formación organizados por las comunidades autónomas (los conocidos como demandantes de empleo no ocupados, o 'denos').
De este modo, todos los supuestos eximidos de entrar en los datos del paro publicados por el Gobierno se pueden agrupar en tres categorías: los ocupados, los que tienen disponibilidad limitada y/o condiciones especiales y los 'denos'.
El segundo grupo es el que alberga una mayor variedad de casos. Incluye a todos aquellos que buscan empleo para menos de tres meses, o con jornadas inferiores a 20 horas, además de a los que buscan su primer empleo, o a los menores de 25 años que cursan estudios oficiales. También están contemplados aquí los que sólo buscan trabajar en el domicilio o en el extranjero. En total, 208.083 personas estarían actualmente en este epígrafe.
En el grupo de los 'denos', además de los que realizan cursos oficiales de formación, se encuentran todos aquellos que cobran el Aepsa o el antiguo PER, es decir, los trabajadores eventuales agrícolas subsidiados (teass). Hasta 260.250 personas, que se restaron a los datos oficiales del desempleo en la última reforma.
En total, nos encontramos con que, en este momento, 468.333 personas 'desaparecen' de las cifras del paro (no incluimos a los 'ocupados', por tener ya un puesto de trabajo, pese a buscar uno nuevo). Sumadas a las 4.130.625 que declara el Gobierno harían un total de 4.598.958 desempleados en nuestro país.
Este medio millón de parados 'ocultos' es una de las razones por las cuales nunca coinciden los datos del Gobierno con los de la encuesta de población activa (EPA) publicada por el INE. En su última referencia, del último trimestre de 2009, este estudio refleja la existencia de 4.326.500 parados, por los 3.923.603 que reconocía el Ejecutivo en ese momento.